No caben muchas cosas, sólo las justas, ya que el objetivo era hacer un bolso pequeño que no pesara y poderlo llevar siempre encima, ideal para viajes, pasear, bailar...
Muy fácil de hacer, es simplemente un rectángulo y una cremallera. A los laterales se han cosido unas presillas de piel para poder pasar la tira trenzada, suficientemente larga para llevarlo cruzado.
Un pequeño corazón de tela relleno, cosido a máquina y rematado con un festón. Y para darle más personalidad le hemos añadido unas "fantásticas" perlas, je je. Son unos pendientes comprados en los chinos por un euro y encima nos sobra la pareja para hacer otro. Es para compensar, porque no se nos ocurrió preguntar el precio de la tira trenzada de piel SINTÉTICA y nos costó más que el bolso!!! Preguntad siempre los precios, os ahorraréis disgustos.
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